Durante este año mujeres de alto poder comunicacional han producido diferentes declaraciones a favor de la reinvidicación de la igualdad de géneros, como es el caso de Patricia Arquette en la entrega de los premios de la Academia el domingo pasado, sin embargo, la mayoría de mujeres profesionales del mundo actual siguen sin tener una mayoría representativa dentro del mundo del business.
Este año el Mobile World Congress Barcelona (MWC) sigue trayendo a los más afamados del área digital para informar acerca de los principales descubrimientos en el sector de las telecomunicaciones y los dispositivos móviles, sin embargo sigue siendo una mayoría masculina la que domina entre los grandes conferencistas. Este año 4 mujeres entre 37 hombres se subirán al podio de los keynotes.
Las mujeres del MWC están en las promoción de los stand, algunas muy contadas dentro de los panelitas y CEOs de start ups pero también están las incubiertas dentro del negocio paralelo del MWC, ese negocio donde la mujer es vendedora de sí misma: las escorts.
Desde el aumento de la crisis, centenares de mujeres han visto como negocio convertirse en damas de compañía o escorts y, no es sino durante este MWC, que este negocio corporal y de desahogo sexual comienza a promoverse tanto por agencias como por las mismas escorts, logrando aumentar el volumen del negocio en un 30%.
Más allá de la moralidad arcaica, cualquier mujer que desea convertirse en escort y vender sus artes amatorias sin ser explotada, es digno de admiración y empoderamiento en un mundo masculinizado. Sin embargo, debemos lograr salir del negocio paralelo, establecerlo, e incluir por otra parte, a un porcentaje igualitario de mujeres profesionales dentro del sector digital.